Toyota Gazoo Racing venció en las 6 Horas de São Paulo para iniciar su lucha por el título del Campeonato Mundial de Resistencia, en una jornada de cara y cruz para los coches #8 y #7 en Interlagos.
En el mismo escenario en el que Toyota consiguió su primera victoria en el WEC con motor híbrido en 2012, los campeones del mundo Sébastien Buemi, Brendon Hartley y Ryo Hirakawa consiguieron su primera victoria de la temporada con el GR010 Hybrid #8 y por más de un minuto de diferencia respecto a su máximo perseguidor, el #6 Porsche, ante una apasionada multitud brasileña que ocuparon las gradas con 73.205 espectadores.
Una segunda victoria del año ganada con esfuerzo, gracias a una conducción impecable, un sólido trabajo en equipo y una estrategia de neumáticos superior, permitió obtener el máximo de puntos para Toyota y redujo la diferencia con el líder, Porsche, a tan solo cuatro puntos en la clasificación de constructores a falta de tres carreras para el final de la temporada. Por primera vez desde Bahréin el pasado mes de noviembre, una primera fila compuesta íntegramente por Toyota lideró la carrera al comienzo. Con el GR010 Hybrid #7 estuvieron Mike Conway, Kamui Kobayashi y Nyck de Vries que se hicieron con la pole position. Mike hizo una salida limpia y comenzó a ganar ventaja sobre el grupo perseguidor. Brendon con el #8 se recuperó después de salirse de la pista en la primera curva y se acomodó en el segundo lugar. Mike cuidó sus neumáticos medios por las altas temperaturas de la abrasiva superficie de la pista de Interlagos y trazó un rumbo seguro a través del tráfico. En la primera hora, logró una ventaja de 11 segundos sobre Brendon, que logró mantener detrás al Porsche #5.
El #7 todavía tenía el control cómodamente al paso de los primeros 90 minutos, pero sufrió su primer golpe cuando una penalización de drive-through por una infracción de la bandera amarilla en toda la pista eliminó la ventaja de Mike. Cuando iban camino de la victoria una larga parada en boxes por un problema técnico les hizo perder posiciones y una gran cantidad de tiempo. Nyck reanudó la carrera en el puesto 18.
Para entonces, Ryo Hirakawa estaba al volante del #8 para asumir el desafío de la victoria del equipo y pronto se colocó al frente. A mitad de la carrera, había ampliado su ventaja a 30 segundos y entró en boxes para cambiar los neumáticos Michelin solamente los del lado derecho del coche; una estrategia para mantener la temperatura de los neumáticos y controlar la degradación.
Ryo hizo un stint rápido en su debut en Interlagos para construir una ventaja de más de 40 segundos en las últimas dos horas antes de entregarle el testigo a Sébastien Buemi. La actuación combativa de Nyck de Vries llevó al #7 de nuevo a la lucha por los puntos y Kamui Kobayasi tomó el volante durante los dos últimos stints.Sébastien mantuvo la velocidad constante del #8 en cabeza, hizo una última parada para repostar a falta de una hora y reanudó la carrera con una clara ventaja. La mantuvo hasta la bandera a cuadros, terminando 1 minuto 8,811 segundos por delante del Porsche #6.
La decidida lucha del #7 continuó hasta la bandera a cuadros y Kamui persiguió al Ferrari #51 en las últimas vueltas, abriéndose paso con un impresionante adelantamiento por el cuarto puesto y conseguir 12 valiosos puntos para el Campeonato del Mundo.
Después de la visita a Sudamérica, la apuesta del equipo por retener sus títulos del Campeonato Mundial se traslada a Norteamérica para la próxima carrera, en el Circuito de las Américas en Austin, Texas, el 1 de septiembre.