Elfyn Evans encabeza la clasificación tras el primer bucle del viernes por la mañana, mientras que el favorito al título, Thierry Neuville, ha sufrido un imprevisto mecánico que le ha hecho perder casi 40 segundos.
Con sólo cuatro de los 21 tramos del rallye completados, el final de temporada del WRC ya está haciendo honor a su dramática reputación. Aunque las estrellas de Toyota Sébastien Ogier y Takamoto Katsuta estuvieron entre los que tuvieron problemas, fue el problema técnico de Neuville el que acaparó la atención.
El belga tiene un liderato de 25 puntos sobre su compañero de equipo, Ott Tänak, en el campeonato de pilotos y sólo necesita seis puntos para sellar el título de 2024.
Sin embargo, nada es seguro hasta la rampa de meta del domingo por la tarde, y una misteriosa pérdida de potencia en el TC4 en Shinshiro hizo que Neuville perdiera casi 40 segundos y le dejó con serias preocupaciones de cara a la tarde. Neuville y su copiloto, Martijn Wydaeghe, tienen pocas herramientas para resolver el problema, ya que sólo una zona de montaje de neumáticos separa los bucles de la mañana y de la tarde.
Tänak lideró los dos primeros tramos, pero cedió el liderato a Evans tras el tramo 4, cuando el galés le aventajó en siete décimas de segundo.
Las esperanzas de Toyota de recortar los 15 puntos de liderato de Hyundai en el campeonato de constructores sufrieron un duro golpe, ya que tanto Katsuta como Ogier sufrieron daños en los neumáticos en el primer tramo del día. Katsuta terminó cuarto en la general, mientras que Ogier se quedó a más de dos minutos del liderato después de un largo cambio de rueda. A pesar de sus problemas, Neuville se mantuvo a 40,2 segundos de la cabeza y conservó una ventaja de 31 segundos sobre Katsuta en la clasificación general.
Adrien Fourmaux, que lideró la carrera tras la noche de arranque del jueves, tuvo problemas para repetir su ritmo inicial. El desgaste de los frenos y las dificultades para hacer girar su Ford Puma en las curvas cerradas limitaron al piloto de M-Sport Ford a la quinta posición.
Andreas Mikkelsen también tuvo una mañana frustrante, ya que el piloto de Hyundai se fue largo sobre el asfalto resbaladizo en el TC02 y evitó por poco quedarse atascado. Un problema con el depósito de combustible de su coche también provocó que se derramara líquido sobre el parabrisas, pero llegó a la zona de montaje de neumáticos 6,3 segundos por detrás de Fourmaux.
Grégoire Munster, de M-Sport, fue séptimo, y el líder del WRC2, Nikolay Gryazin, octavo. Ogier, recuperándose de un retraso de casi dos minutos durante su cambio de rueda, fue noveno, mientras que Sami Pajari completó el top 10 y se mantuvo segundo en WRC2, una posición que, tal y como está, le aseguraría el título de campeón.