El piloto madrileño, Adrián Ferrer, será una de las estrellas en el Arca Minards, campeonato previo a la NASCAR, dentro del equipo Central Coast Racing
Después de proclamarse brillante campeón de la GR Cup Spain a sus 15 años, Adrián Ferrer se ha embarcado en una nueva aventura de la mano de Fernando Navarrete y Gonzalo de Andrés, que le llevará a realizar el campeonato Arca Menards, una división por debajo de la NASCAR USA, a cuyo vencedor se le otorga el derecho a un volante dentro la categoría mayor.
En 2024 más de 120 pilotos repartidos entre las diferentes competiciones de esta categoría entre la Costa Este y la Costa Oeste, realizaron alguna de las 20 pruebas que componían el certamen, resultando ganador el mexicano Andrés Pérez por delante de los estadonunidenses Lavar Scott y Kris Wrigth. Adrián Ferrer, reciente ganador de la GR Cup Spain con el Toyota GR86, ya realizó unos tests en las semanas anteriores a su fichaje, dando como resultado el visto bueno del equipo americano con el hizo estas pruebas, Central Coast Racing. Para dar este importante paso en su carrera deportiva, Ferrer ha contado con la inestimable colaboración y ayuda de Fernando Navarrete, Gonzalo de Andrés, Fernando Pedrera , Antonio Yébenes y, como no, Toyota. De hecho, el coche en el que se subió Adrián Ferrer, era un Toyota Camry de la NASCAR, un vehículo de unos 700 CV que, con brida para esta categoría, se queda en la nada despreciable cifra de 580 CV.
Después de rodar en los circuitos de Stocktom y Madera, donde realizó los mismos tiempos prácticamente que las “poles” de este año, el equipo vio con buenos ojos la llegada del madrileño, por lo que Ferrer afrontará la competición en 2025 como primer piloto en el equipo Central Coast Racing.
La ayuda de Toyota España en el proyecto, para que Toyota USA se implique ha sido un paso decisivo para que Adrián Ferrer afronte esa oportunidad en su carrera deportiva, ya que otro de los objetivos que se marcaba al inicio su entorno era una temporada en la Fórmula 4, un campeonato que a la postre en mucho más caro y complicado para el apoyo de sponsors, algo que en Estados Unidos podría a ser algo más fácil si todo marcha bien.