Max Verstappen vuelve a dominar con puño de hierro una clasificación, esta vez en casa. El holandés, en una sesión muy complicada desde el principio, dio un duro golpe en los últimos minutos para marcar el mejor tiempo.
La sesión de clasificación del Gran Premio de los Países Bajos comenzó con la pista mojada. Las condiciones no eran fáciles para ninguno de los pilotos, pues el circuito, que estrenaba asfalto, tenía muchas zonas de baja adherencia y otras secas en las que se podía arriesgar más para sacar el tiempo. En esas condiciones, la única baja reseñable fue la de Esteban Ocon, que terminó cuarto por la cola. Además del francés, se quedaron fuera los dos Hass, los dos Alfa Romeo y el debutante Liam Lawson, que reemplazó a Ricciardo por lesión, y que, de momento, ha tenido un debut muy discreto.
La segunda eliminatoria (Q2) también se disputó bajo condiciones complicadas, y buena prueba de ello fue la eliminación de pilotos como Hamilton y Stroll. La pista seguía con zonas muy críticas y el riego de quedarse fuera en esta ronda era bastante alto, como así fue para los dos protagonistas anteriormente citados.
En la tercera y última eliminatoria (Q3) se palpaba la tensión desde el primer segundo. Y así fue tras las dos banderas rojas provocadas por Logan Sargeant y Charles Leclerc al salirse de pista. Después de la última bandera roja, la que provocó el monegasco, todos los pilotos salieron a rodar para intentar sacar un buen tiempo lo antes posible, pues la amenaza de una nueva bandera estaba en la mente de todos. En el último instante, pues sólo quedaban cuatro minutos, Verstappen logró imponerse al Mclaren de Lando Norris, que hasta entonces parecía el favorito para hacerse con la pole. Alonso, por su parte, sólo pudo ser quinto, aunque estuvo a punto de ser tercero. Y Sainz, que concluyó sexto, no ha podido brillar en el circuito holandés.
Mañana domingo, a las 15:00 horas, se espera un nuevo monólogo de Verstappen y, sobre el papel, una más que posible batalla entre Alonso, Albon, Russell y Norris. La constancia del Aston Martin, en cuanto a ritmo y degradación, y la calidad de Alonso, podrían regalar un nuevo podio para el piloto español.
