Tras la introducción de las dos variantes con motor V8, Mercedes-AMG presenta ahora el SL 43, la versión de acceso de cuatro cilindros del legendario roadster
Los cuatro cilindros en un Mercedes no es algo desconocido ya, pues el Mercedes-Benz 190 SL, fabricado entre 1955 y 1963, venía con un motor atmosférico de gasolina de cuatro cilindros y 1.9 litros que producía 105 CV. Los tiempos cambian, y Mercedes no ha querido quedarse atrás, pero sin olvidar sus orígenes. Desde el Mercedes-Benz 190 SL W121, la versión "barata" del primero de los SL (el Mercedes-Benz 300 SL), este modelo no había vuelto a ver un motor tetracilíndrico, hasta ahora.
El motor que monta este Mercedes-AMG SL 43 no es desconocido para la marca ya que es el mismo que da vida al Clase A. Es decir, esta formado por un bloque de 2.0 litros con un turbocompresor eléctrico, como el que nos encontramos en el A 45, y en disposición longitudinal en vez de transversal, firmando los 381 CV y los 480 Nm de par máximo. Además, el motor se encuentra acompañado de un sistema mild-hybrid, lo que hace que este modelo de Mercedes sea el primero en portar la etiqueta ECO. Al igual que el resto de microhíbridos EQ Boost de Mercedes-Benz, el sistema eléctrico de 48 V integra un pequeño motor eléctrico de arranque-alternador-generador RSG accionado por correa, acoplado entre la caja de cambios y el motor. Este bloque firma los 10 kW (14 CV), tomando su energía de una batería auxiliar, además de alcanzar un máximo de 170.000 rpm. Por primera vez en la historia, un Mercedes SL va dotado de tracción total, aunque el SL 43 dispone de tracción trasera.
Como el resto de modelos, la mecánica va gestionada por el cambio AMG SpeedShift MCT 9G de nueve relaciones. Esta caja dispone de un embrague húmedo para el arranque, en sustitución del convertidor de par. Este componente contribuye a reducir el peso y mejora con su menor inercia de masas la respuesta a las órdenes transmitidas mediante el pedal acelerador, especialmente al acelerar con rapidez y en los cambios de carga. La función de doble embrague en los programas de conducción Sport y Sport+ propicia además una experiencia de conducción especialmente sugestiva, además de implementarse la función Race Start que garantiza una aceleración óptima a partir de vehículo parado. El SL 43 acelera en tan solo 4,9 segundos de 0 a 100 km/h y alcanza una velocidad máxima de 275 km/h.
El Mercedes-AMG SL 43 es un descapotable de dos puertas que da cabida a cuatro ocupantes, con una distribución de 2+2. Esta nueva generación es más largo que su antecesor, el R232, firmando los 4,7 m de largo, unos 7 cm más. En cuanto al ancho del coche, firma el 1,91 m y de alto 1,36 m. Este modelo equipa faldones específicos delante y detrás y embellecedores en las salidas de escape redondos en lugar de rectangulares. Entre los atributos característicos del diseño de la carrocería del SL cabe mencionar la batalla larga, los voladizos cortos, el capó largo y el habitáculo situado en una posición atrasada, con un parabrisas muy tendido, y la rotunda zaga. De aquí resultan las proporciones típicas del SL, que confieren al roadster su porte dinámico y poderoso en combinación con las voluminosas cajas pasarruedas y las llantas de aleación de formato grande, enrasadas con la chapa exterior de la carrocería. El SL 43 calza de serie llantas de aleación de 19 pulgadas con propiedades aerodinámicas optimizadas en formato de 20 o 21 pulgadas de diámetro. Estas llantas provocan menos turbulencias, con lo que disminuye la resistencia aerodinámica.
Otro gran protagonista en esta nueva generación del Mercedes SL es la capota de lona, que regresa tras varias generaciones a este icónico modelo, pasando a mejor vida el techo duro retráctil de las anteriores. La capota textil del Mercesdes-AMG SL influye asimismo en la arquitectura, pues ha permitido el ahorro de 21 kg respecto al modelo saliente, además de bajar el centro de gravedad de este automóvil. Y a su vez la trasera es más corta, fina y elegante. El nuevo Mercedes-AMG SL llega hasta los 1.970 kg en su variante SL 63 4Matic+, que en su caso incluye la tracción integral, o hasta los 1.810 kg en el SL 43.
El interior del Mercedes-AMG SL 43 cautiva con la sugestiva combinación de geometría analógica y mundo digital, un concepto denominado «hiperanalógico» por los especialistas. Un ejemplo de esta concepción es el cuadro de instrumentos completamente digital, integrado en un visor tridimensional. Para el sistema de infoentretenimiento MBUX incorporado de serie puede elegirse entre varios estilos específicos de visualizado y distintos modos. El tablero de instrumentos simétrico responde a un diseño robusto en forma de ala y se divide en una sección superior y otra inferior. Entre los aspectos destacados cabe mencionar los cuatro difusores galvanizados de turbina para la ventilación. La superficie de estos elementos se prolonga en forma de rotundos resaltes longitudinales en el tablero de instrumentos. La sección inferior del tablero de instrumentos evoluciona de forma fluida a partir de la consola central y combina ambos elementos sin solución de continuidad.
A pesar de su simetría, el diseño del puesto de conducción está claramente centrado en el conductor. La pantalla LCD de alta definición en formato de 12,3 pulgadas del cuadro de instrumentos no es exenta, sino que está integrada en un visor de alta tecnología que evita reflejos de la luz solar. Con el fin de evitar asimismo las reflexiones de la luz debidas a la posición del sol en el horizonte, que pueden resultar molestas al conducir con la capota abierta, es posible variar por vía eléctrica la inclinación de la pantalla táctil en la consola central, entre 12 y 32 grados. El SL 43 equipa de serie asientos de confort con numerosas opciones de ajuste eléctrico y manual, tapizados en una combinación de símil de cuero ARTICO y tela.