El piloto belga, acompañado por Martijn Wydaeghe, cierra la jornada del jueves como líder con su Hyundai i20 N Rally1. Su ventaja, de seis décimas sobre el Toyota GR Yaris Rally1 de Sébastien Ogier y Vincent Landais. Dani Sordo y Cándido Carrera, séptimos.
Si una prueba del Campeonato del Mundo de Rallyes arranca con una superespecial, Thierry Neuville procede a firmar el mejor registro en ella. El de Hyundai Motorsport, un especialista en esos recorridos diseñados para el disfrute del espectador, impuso su i20 N Rally1 en 'Figueira da Foz'. Delante de miles de aficionados, el belga, acompañado por su compatriota Martijn Wydaeghe, se labró una ventaja de seis décimas de segundo con respecto a sus rivales más próximos en la tabla de tiempos. Ninguno de los equipos de la categoría reina acabó muy satisfecho con el planteamiento del tramo de apertura.
La preocupación de los pilotos, además de evitar los obstáculos de las cronometradas urbanas, era no castigar en exceso sus neumáticos. La normativa les obliga a usar en el primer bucle del viernes las mismas ruedas que montaron para este aperitivo del jueves. Y esto no sentó bien a los protagonistas del máximo certamen, que ya habían propuesto cambios en anteriores ocasiones. Por ello, limitaron las dosis de espectáculo en un escenario repleto de dispositivos que invitaban a realizar giros completos con el modo derrape activado. "No nos escuchan", declaró Neuville al cruzar por meta. Su única alegría, el liderato.
Sébastien Ogier y Vincent Landais situaron su Toyota GR Yaris Rally1 en la segunda posición. El ocho veces campeón mundial, que en una rueda de prensa anterior a la competición confirmó que estará en el Rallye de Polonia, fue otro de los que mostró su descontento, llegando incluso a plantear alternativas a los organizadores. El top tres lo cerraron Ott Tänak y Martin Järveoja con su Hyundai i20 N Rally1. Los estonios, que afrontan un fin de semana muy importante para sus opciones al título, esperan, en primera instancia, encontrar el ritmo y cierta comodidad con el vehículo surcoreano. Luego, ganar.
Takamoto Katsuta y Aaron Johnston, liberados de la presión de ser los elegidos para puntuar en el apartado de marcas, empataron a la décima con la tripulación #8, mientras Kalle Rovanperä y Jonne Halttunen dirigieron su Toyota GR Yaris Rally1 a la quinta plaza. Adrien Fourmaux y Alexandre Coria, solos en su estrategia de llevar un neumático de respuesto para la mañana del viernes, terminaron la superespecial en P6 con su Ford Puma Rally1. Los españoles Dani Sordo y Cándido Carrera, con el tercer Hyundai i20 N Rally1, hicieron el séptimo mejor crono. Grégoire Munster y Louis Louka fueron decimoquintos.
En WRC2, Yohan Rossel y Arnaud Dunand tomaron la iniciativa con su Citroën C3 Rally2. Los franceses decidieron atacar al considerar que, entre empujar y conservar, no habría grandes diferencias en el estado de los neumáticos. Pierre-Louis Loubet y Loris Pascaud, en su estreno en el Mundial sobre el Skoda Fabia RS Rally2, se ubicaron en el segundo puesto, uno por delante del Hyundai i20 N Rally2 de Kris Meeke y Stuart Loudon. Pepe López y David Vázquez condujeron su Ford Fiesta Rally2 a la novena posición. Jan Solans y Rodrigo Sanjuán les siguieron con su Toyota GR Yaris Rally2.
