Lando Norris confirmó las expectativas al asegurar la pole position en el Gran Premio de Singapur, aunque la jornada no estuvo exenta de sorpresas. La más destacada fue el séptimo puesto de Alonso, que volvió a deslumbrar una vez más.
Desde la primera eliminatoria, quedó claro que iba a ser una sesión extremadamente competitiva. Charles Leclerc destacó inicialmente, muy cerca del tiempo de Norris. Sin embargo, la gran sorpresa la dio Alex Albon, que brevemente se colocó en la primera posición. Ese primer puesto duró poco, ya que los McLaren tomaron el control rápidamente, con Norris marcando el mejor tiempo sin necesidad de usar neumáticos nuevos. Verstappen, tras un viernes para olvidar, encontró ritmo y se acercó a Norris, mostrando una clara mejora.
Sainz y Alonso avanzaron sin contratiempos a la siguiente ronda, aunque el compañero de Alonso, Lance Stroll, quedó eliminado junto a otros como Ricciardo, Gasly y Bottas.
La segunda ronda de clasificación fue intensa. Verstappen se esforzó al máximo para sacar el mejor rendimiento de su Red Bull, mientras Norris, con un coche claramente superior, volvió a imponer su ritmo casi sin despeinarse. Sin embargo, Piastri fue el más rápido en la Q2. Especial mención merece Alonso, que tras realizar una vuelta impecable, aseguró su pase a la Q3 y dejó fuera a pilotos como Sergio Pérez y Kevin Magnussen.
Sainz choca y Norris sella la pole
La Q3 comenzó con un accidente de Carlos Sainz. El madrileño, en un error de conducción, perdió el control de su SF-24 y chocó contra las barreras, provocando una bandera roja. Tras el obligado parón, todos los pilotos tuvieron un último intento para tratar de clasificarse. Norris se aseguró la pole, mientras que Verstappen, en un esfuerzo monumental, se quedó con la segunda posición. Lewis Hamilton completó los tres primeros, dejando claro que el duelo por la victoria del domingo estará lleno de emoción.
Finalmente, Alonso, aprovechando al máximo las condiciones de pista y los errores del resto de los pilotos, consiguió algo excepcional, terminando séptimo. El asturiano, una vez más, sigue demostrando que es un piloto de otro nivel, muy por encima del resto.
