Tres décadas después de su debut en competición, el SEAT Toledo Marathon ha vuelto a competir… y a ganar. Lo ha hecho en el I RallyClassics África, una prueba de regularidad que permite a vehículos clásicos de rallye-raid demostrar sus prestaciones en el desierto.
Después su presentación en el Salón del Automóvil de Barcelona de 1993, y tras dos años de desarrollo, el SEAT Toledo Marathon debutó aquel año en la Baja Portugal, puntuable para la Copa del Mundo FIA de Rallyes Todoterreno. La primera gran victoria para el modelo español no tardó en llegar. Fue en el Raid de Grecia, donde Josep María Servià y Enric Oller encabezaron el doblete de dos Toledo Marathon, seguido por Antonio Rius y Manel Casanova. Este fue el primer triunfo internacional de la historia de SEAT.
La exitosa incursión de los Toledo Marathon en los rallyes todoterreno continuó en 1994, cuando el modelo español subió al podio de las tres pruebas en las que participó: fue segundo en la Baja Portugal, tercero en la Baja Aragón y segundo en el Raid de Grecia. Esta sería la última carrera para el modelo, tras la decisión tomada por SEAT Sport de dar el salto al Campeonato del Mundo de Rallyes, donde la marca conquistaría un triple título en el Mundial de Marcas 2 Litros (1996, 1997 y 1998).
La división SEAT Históricos, que cuida y mima el legado de la marca, ha conservado una unidad del SEAT Toledo Marathon en estado original y perfecto orden de marcha. Y qué mejor forma que celebrar el 30 aniversario del debut en carrera de este histórico modelo que devolverlo a la competición en el I RallyClassic Africa, disputado entre los días 16 y 21 de septiembre de 2023; una prueba que se presenta como la antesala del rally Dakar Classic.
La unidad del Toledo Marathon fue pilotada en esta prueba por Antonio Rius - que compitió con este modelo en los 90 -, con el experto copiloto Pablo Moreno Huete a su derecha. El reto para los participantes, entre ellos mecánicas previas a los años 90, era mayúsculo: se enfrentarían a cinco intensas etapas y a más de 700 kilómetros de regularidad y difícil navegación en las regiones marroquís de Merzouga y Erfoud, superando paisajes idílicos como las dunas Erg Chebbi y zonas propias de un auténtico Rally Dakar.
Encuadrado en la categoría Classic Pre-2000, el Toledo Marathon guiado por Rius-Moreno Huete logró superar las cinco etapas con maestría, respetando la velocidad máxima de 80 km/h, una velocidad que puede parecer reducida pero que, afrontando rocas, dunas, y ríos secos, requiere de una gran pericia. Finalmente, alcanzó la meta en el Hotel Xaluca con la mejor puntuación y en la primera posición absoluta!! El mejor resultado que cabía esperar para el SEAT Toledo Marathon, que 30 años después compite y vence en el continente africano.
La leyenda del SEAT Toledo Marathon: un coche nacido para el Dakar
El proyecto del Toledo Marathon fue el primer proyecto internacional de SEAT Sport después del Trofeo de Marcas conquistado por SEAT en el Rally de Montecarlo de 1977. Tras la fundación de SEAT Sport en 1985, la marca decidió ir un paso más allá de los rallyes y pasar a competir en raids, una especialidad que admitía vehículos prototipo con gran parecido a los de serie y, al mismo tiempo, brindaba un amplio margen para demostrar la capacidad tecnológica de la marca.
La base elegida fue la del Toledo, el último modelo de SEAT producido en la fábrica de la Zona Franca: el desarrollo comenzó en octubre de 1990 y el modelo fue presentado en 1991. El vehículo se desarrolló según las especificaciones del reglamento internacional del Grupo T3 (vehículos prototipo todoterreno). Sobre una estructura multitubular, la carrocería de materiales compuestos escondía un motor cinco cilindros de 330 CV en posición central, con tracción a las cuatro ruedas, diferencial central (bloqueable) y diferenciales autoblocantes en ambos ejes. SEAT trabajó especialmente en las suspensiones, cruciales en este tipo de competición. Su diseño de dobles triángulos era una de las soluciones más avanzadas e innovadoras del Toledo Marathon, con un recorrido de 30 centímetros.
El desarrollo final del Toledo Marathon se llevó a cabo durante 1992, con Josep Maria Servià como piloto, que ya había competido años atrás con el Ibiza Bimotor. Para ello, SEAT Sport incluso construyó una pista de pruebas en terrenos del Centro Técnico de Martorell. Aplicando toda la experiencia y conocimientos obtenidos en los años anteriores, se consiguió poner a punto un coche muy equilibrado, fiable y competitivo.
Por fin, el SEAT Toledo Marathon se presentó en el Salón de Barcelona de 1993, a mediados de mayo. Un mes y medio más tarde, y después de haber completado 5.000 kilómetros de pruebas, el Toledo Marathon debutaba en la Baja Portugal, puntuable para la Copa del Mundo FIA de Rallyes Todoterreno, con Servià y su copiloto Enric Oller.
La siguiente prueba fue la Baja Aragón, donde Cyril Neveu pilotó la segunda unidad del Toledo Marathon. Las expectativas del equipo se confirmaron en el Raid de Grecia, donde Servià encabezó el doblete de los Toledo Marathon, secundado por Antonio Rius y Manel Casanova.
En 1994, los Toledo Marathon disputaron tres rallyes todoterreno y subieron al podio en los tres. Erwin Weber/Manfred Hiemer fueron segundos en la Baja Portugal y terceros en la Baja Aragón, donde Servià fue cuarto. El piloto gerundense terminó segundo en el Raid de Grecia, en diciembre, la última participación del Toledo Marathon.
Con vistas a 1995 estaba previsto competir en el Dakar, pero el proyecto del Toledo Marathon se dio por concluido y, en su lugar, SEAT Sport dio el salto al Campeonato del Mundo de Rallyes, donde las cualidades del nuevo SEAT Ibiza ofrecían una magnífica base para la competición, pero esta vez con un vehículo estrechamente derivado de la serie.
Así pues, en 1995 el SEAT Ibiza GTI de Grupo A tomó el relevo del Toledo Marathon y consiguió la tercera posición en el Campeonato del Mundo de Marcas 2 Litros. Fue el preámbulo del primer triple título mundial de SEAT, conquistado por el Ibiza Kit Car en el Mundial de Marcas 2 Litros, en 1996, éxito que repitió en 1997 y 1998.
SEAT Históricos conserva en estado totalmente original y en perfecto orden de marcha la única unidad superviviente de las dos construidas del SEAT Toledo Marathon.