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Ya no tienes que comprar un coche nuevo: Renault alarga la vida del tuyo

La firma gala reacondicionará coches de usuarios y flotas para alargar su vida útil con el plan Refactory.

¿Tienes un Mégane de hace varios años, un modesto Twingo un poco achacoso o incluso un Clio Williams? Pues gracias a Renault, ahora podrás renovarlo por completo para alargar su vida útil, con piezas y operarios de la marca, y con un certificado que garantiza las reparaciones Refactory, nombre que se le ha dado al programa bajo el paraguas más amplio de planes Renaulution.

Todo un sueño para muchos usuarios que aman sus Renault y quieren tenerlos consigo mucho tiempo, o que simplemente no están por la labor de comprarse un coche nuevo que cuesta un riñón, y más si debe ser eléctrico. Además, la marca no se cierra, por el momento, a la posibilidad de incluir en sus planes a modelos clásicos, versiones especiales o incluso de otras marcas.

La primera fábrica que realizará este tipo de reacondicionamiento será la francesa de Flint, y la siguiente, la española de Sevilla, como anunciaron el presidente de la Junta, Juan Manuel Moreno Bonilla y José Vicente de los Mozos, director industrial de Renault Group y presidente-director general de Renault España, esta misma semana. Por el momento, se desconocen los costes exactos de este tipo de labores, pero ya sabemos mucho sobre el proceso, que se estima comenzará en Sevilla a finales del año que viene. Renault se mete así de lleno en un terreno que hasta la fecha ocupan los grandes compra venta de usados, habituados a reacondicionar coches para revenderlos. 

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Piezas originales

El proceso de reacondicionamiento Refactory empieza con un lavado exhaustivo de los coches que lleguen a la planta, una peritación de todos sus daños y una petición de las piezas necesarias para su reparación, que serán originales y totalmente nuevas.

A continuación comenzará la reparación mecánica, que incluye una revisión de 100 puntos de control. Tras estos pasos, se reparará la carrocería y se realizarán los controles de calidad necesarios para dar el visto bueno y que el coche no tenga problema alguno en pasar la ITV.

El vehículo se entregará al cliente totalmente limpio tras la realización de un reportaje fotográfico y de vídeo, a los que se sumará una certificación oficial con un sello Refactory que se podrá ver bajo el capot y cuya copia recibirá el propietario.

Por otra parte, y bajo el nombre de Reenergy, la factoría de Renault de Sevilla incluirá en los planes de reacondicionamiento a los coches eléctricos a partir de 2024, cuyas baterías podrán ser reparadas y puestas a punto. Todas estas actividades supondrán invertir en preparar una superficie de 5.000 metros cuadrados, con la intención de que en el año 2025 puedan ser reacondicionados unos 10.000 vehículos al año, entre los que 1.000 de ellos serán eléctricos.

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¿Y si tengo un Clio Williams o un Renault Clásico?

El trabajo de Refactory se basa en las economías de escala, y Renault cree que la mayor parte de los coches que reacondicionará tendrán tan solo unos años de vida previa, y lo hará mediante procesos estandarizados, con lo que los casos de modelos clásicos o especiales deberán estudiarse previamente con detenimiento.

En todo caso, no se descartan de ninguna manera, pero muchos de ellos puede ser recomendable que se reparen en los concesionarios cercanos en lugar de trasladarlos a Sevilla. "A día de hoy ya tenemos concesionarios oficiales, como el de Vigo, capaces de hacer virgerías con coches con años encima, pero puede no ser un proceso tan fácil para la factoría de Sevilla", han comentado a AUTOhebdo fuentes oficiales. Poco a poco Renault irá proporcionando más información a este respecto.

 

¿Legales hasta cuando?

La solución Refactory propuesta por Renault todavía cobrará más fuerza y sentido en 2035, fecha en la que está programada la prohibición de la venta de coche de gasolina o diésel, que de esta forma podrán seguir circulando con garantías por mucho tiempo. Además, en los planes de Renault también está el de mejorar las etiquetas de los coches que no las tienen mediante procesos que disminuyan sus emisiones. ¿Y por cuanto tiempo podrán seguir usando sus propietarios los coches de combustión tras la prohibición de venderlos nuevos? Imposible saberlo, porque eso depende de los políticos. En Cuba, por ejemplo, se prohibió importar coches en los años 60, tras la revolución... y los que se quedaron en la isla siguen funcionando.