Thierry Neuville acaba con su sequía de siete meses sin ganar un rallye del mundial y se mete de lleno en la lucha por el título. Gracias a su victoria en Italia, el belga escala hasta la segunda posición de la clasificación general.
La estrella belga Neuville aventajó en 33 segundos a su compañero del i20 N Esapekka Lappi en un soñado doblete de Hyundai en la sexta prueba de 13, logrando el 18º éxito de su carrera junto a su copiloto Martijn Wydaeghe.
El resultado supuso el primer triunfo de Neuville y su equipo en 2023, y ayudó a la marca coreana a situarse a 23 puntos del liderato del campeonato, que ostenta el constructor Toyota Gazoo Racing.
El liderato cambió de manos nada menos que nueve veces durante la trepidante prueba de la isla mediterránea, hasta que Neuville tomó la iniciativa cuando Sébastien Ogier, rival del GR Yaris, se salió de la carretera en la penúltima prueba del sábado, marcada por la lluvia.
En la misma especial, superó a Lappi, que celebraba su tercer puesto consecutivo entre los tres primeros, y logró una cómoda ventaja en los cuatro tramos finales del domingo.
"Obviamente ha sido un fin de semana difícil", dijo Neuville, que ahora está 25 puntos por detrás del líder de la serie, Kalle Rovanperä. "Llegamos aquí con la convicción de que podíamos luchar por la victoria, pero el primer día fue complicado y perdimos un poco de tiempo. Ayer nos encontramos en el liderato y tuvimos que gestionarlo hasta el final.
"Es la primera victoria para el equipo este año, es un doblete, y también la primera victoria para nuestro director de equipo Cyril Abiteboul. Craig Breen también está en nuestra memoria: queríamos la victoria en Croacia para él, pero ahora la hemos conseguido".
Rovanperä completó el podio en tercera posición de la general, su mejor resultado en cinco participaciones en el Rallye de Italia Cerdeña.
Aunque se quedó a 1 minuto 22.3 segundos de su compatriota Lappi en la meta, el alto ritmo de desgaste le permitió terminar con una considerable ventaja de 3 minutos 25.2 segundos sobre su compañero de equipo Elfyn Evans. Evans tuvo problemas para encontrar el ritmo con su GR Yaris y bajó unos tres minutos el sábado cuando el radiador del coche sufrió daños en un cruce de agua.
Dani Sordo estuvo a punto de meter tres Hyundai entre los cinco primeros, pero se retiró tras el segundo tramo del día por un fallo en el escape. Esto puso fin a un fin de semana turbulento para el español, que ya había volcado su i20 N el viernes por la mañana.
Su abandono allanó el camino para que Andreas Mikkelsen se adjudicara la quinta posición de la general y la sorprendente victoria en WRC2. Adrien Fourmaux le llevaba más de medio minuto de ventaja antes del Wolf Power Stage, pero el francés se salió de la carretera 1,4 km después del inicio.
La temporada del WRC entra en su segunda mitad con una visita muy esperada a África a finales de este mes. El legendario Safari Rallye de Kenia tiene su sede en Naivasha y se celebra del 22 al 25 de junio.
