El piloto español da un paso más para hacerse con el título. Lo ha hecho en un Gran Premio de Toronto que ha planteado muchas dificultades a lo largo de toda la carrera.
Álex Palou está en un estado de forma sobresaliente. En una carrera, en la que tenía todo en contra, el piloto de Chip Ganassi Racing supo superar las adversidades y protagonizar una remontada que se podría calificar de histórica.
La salida de Palou fue buena, sin incidentes. Además, le acompañaba una estrategia que fue todo un acierto, pues salió con neumáticos duros para conseguir un stint largo que le permitió ganar tres posiciones (del puesto 12 al 9). Sin embargo, la clave de la carrera se dio cuando los comisarios mostraron la segunda bandera amarilla provocada por Romain Grosjean. En ese momento, el piloto español entró nuevamente en boxes para reemplazar las ruedas blandas (prácticamente nuevas), para montar otra vez las duras y ahorrarse unos segundos. Un tiempo de oro que le permitió ponerse líder. Sin embargo, en esta última fase de la carrera, surgieron complicaciones. El brasileño Hélio Castroneves, que iba por delante de Palou, protagonizó un trompo que obligó a Palou a irse contra el muro. Como consecuencia de dicha maniobra, la nariz del monoplaza quedó fisurada, un desperfecto que fue a más y que hizo que el español terminara a duras penas en una meriotoria segunda posición, justo por detrás de Christian Lundgaard.
La IndyCar volverá la semana que viene, concretamente al óvalo de Iowa, en una doble cita que se celebrará los días 22 y 23 de julio.
CLASIFICACIÓN DEL GP DE TORONTO
RESUMEN GP DE TORONTO
